Pages

Subscribe:

Ads 468x60px

.

Labels

Social Icons

3/5/11

De la justicia a la venganza

Es propio de necios el perseverar en el error y eso es lo que parece que está ocurriendo. Era lógico y acertado que los Estados Unidos buscasen a Osama Ben Laden hasta debajo de las piedras después del humillante atentado de 2001, y también hubiera sido lógico y acertado que lo hubieran capturado y puesto a disposición de un tribunal civil y que hubiera dado con sus huesos en la cárcel. Era lo que merecía. Pero de ahí a celebrar su muerte como un acontecimiento festivo media una gran distancia. Los políticos y las personas que muestran este comportamiento primario están sentando las bases para que el ciclo de violencia se repita indefinidamente siguiendo el patrón del ojo por ojo. Nunca la muerte traerá vida, siempre traerá más muerte. Nunca el mal trae bien, siempre trae mal. Confío en que este paroxismo contumaz que afecta a nuestras sociedades occidentales sea solo una febril muestra de instintos primarios efímeros y que el tiempo nos devuelva a la razón y el control. Los Estados democráticos modernos cuentan con instrumentos suficientes para ejercer la justicia sin consumar venganzas. Cuando un Estado capaz de arrebatar vidas contiene su poderío y se limita a ponerlas bajo prisión está ejerciendo la magnanimidad, está demostrando su justicia y su grandeza democrática, en el lado opuesto estará estatalizando el crimen y la venganza mezquina. El terrorista era ya un anciano enfermo que probablemente haya celebrado su muerte, pero su familia y su entorno no tendrán la misma percepción y anhelarán venganza. En España, donde algo sabemos de terrorismo, lo hemos combatido con instrumentos policiales y judiciales no bélicos, excepto el oneroso episodio de los GAL, y bien nos ha ido, pues el apoyo social del terrorismo ha ido menguando hasta encontrarse bajo mínimos. La imagen de nuestros poderes públicos se ha mostrado como vengativa y vergonzante a ojos del oriente y del occidente crítico, pues no solo hay que contemplar la muerte de un terrorista sino los efectos que tendrá sobre el entorno. El tiempo dirá si su muerte debía celebrarse o velarse.

2 comentarios:

  1. visto lo visto, no se podia esperar más del gobierno mericano...no falta ir más allá, para entender k esto es una pantomima para justificar la guerra, el hambre, la podreza y la angustia de la humanidad k es lo k engrandece y da poder a los gobernantes del mundo!!!

    ResponderEliminar
  2. Anónimo13:59

    Estoy contigo

    ResponderEliminar