Pages

Subscribe:

Ads 468x60px

.

Labels

Social Icons

29/8/11

Venancio corredor de fondo

   Iba corriendo por un camino polvoriento semidesértico cuando noté una presencia a mis espaldas que me hizo estremecer. Discretamente giré la cabeza y vislumbré una nube de polvo gigantesca acercándose a mí. Todos mis instintos primarios se dispararon en señal de alarma, mi corazón, ya de por sí acelerado, se desbocaba, mi respiración al borde de la asfixia, las piernas temblequeando. Una vibración constante y rítmica se aproximaba. Me pregunté qué podía ser aquello ¿rinocerontes, elefantes? imposible, no vivía en África. Me aparté del camino aterrorizado y busqué refugio vanamente entre la exigua vegetación. 
   Apenas tuve tiempo de ver a Venancio trotando con parsimonia pero sin cejar. ¿Era el Venan? ¿El mismo chico del insti que apenas era capaz de correr cincuenta metros porque se asfixiaba? Parecía que sí. Me incorporé con las pulsaciones recuperadas y me dispuse a correr tras él. Supuse que no tardaría mucho en agotarse. A duras penas lo alcancé.
   _Hola, Venan, ¿no me has visto? estaba ahí en el camino.
   _Sí ¿tenías miedo?
   _No, estaba atándome los cordones.
   _Ya.
   _¿Te importa que te acompañe?
   _Tú mismo _contestó lacónico.
   _Llevas buen ritmo, ¿cuánto piensas hacer?
   _Quince kilómetros.
   _Jajaja, venga, va, en serio.
   _Quince kilómetros.
   _¿Hablas en serio?
   _¿Tengo que decírtelo tres veces?
   _Bueno, venga, yo voy fresco.
   Al cabo de unos cinco kilómetros comencé a darme cuenta no solo de que iba en serio, sino de que yo iba a ser incapaz de seguirlo.
   _Oye, Venan, creo que voy a tirar por este otro camino ¿te quieres venir?
   _Yo sigo por donde voy.
   _Vale, Venan, que vaya bien.
   Apenas lo perdí de vista me desplomé al suelo y allí estuve durante un cuarto de hora recuperándome. A pesar de que Venan apenas había adelgazado debía de tener una musculatura bestial bajo la capa de grasa.  Regresé al camino y troté a mi ritmo tratando de recuperar el orgullo marchito.

0 comentarios:

Publicar un comentario