Fantasía

     _Me han dicho que hay una discoteca en New York que está que revienta.
     _¿Cuál?
     _La Flow Dreams.
     _¿Es que no la conocías aún?
     _No. Ya veo que tú sí.
     _Lleva abierta desde el verano de 2076, creo. Yo ya he ido tres o cuatro veces. Ahora con el hiperdeslizador te pones allí en cuarenta minutos.
     _Ya, eso sí lo sé. Cuando quieras vamos juntos, tío. Me han dicho que venden una droga diferente.
     _Sí, se llama fantasía.
     _¿Fantasía?
     _Sí. Al principio tuvieron problemas con la fórmula y les metieron un paquete que no veas. Pero mejoraron la composición y ahora están forrándose.
     _¿Qué pasó?
     _La gente entró en hipnosis colectiva, tuvieron ataques epilépticos y paranoia. De todo.
     _La hostia, qué lleva eso.
     _La fórmula es secreta. Sus efectos son mejores que ninguna otra droga. La suministran a toda la discoteca mediante nitrógeno líquido. La gente aspira los vapores y se va poniendo.
     _La hostia. Y ¿no te metes sobredosis?
     _Esa es una de sus ventajas, no produce sobredosis. Estimula lo mismo el vapor inhalado durante un minuto que durante ocho horas. Una vez alcanzas tu dosis, se mantiene estable el efecto en el cuerpo mientras sigas inhalando. Por eso tiene tanto éxito.
     _Entonces, si quieres ponerte toda la noche tienes que estar allí toda la noche inhalando ¿no?
     _De eso se trata. De que permanezcas allí toda la noche.
     _La hostia. ¿Y qué sientes?
     _Que el alma se separa del cuerpo y realizas viajes astrales.
     _La hostia. ¿Vamos ya?