No me retes

No me retes, salvo que quieras ser derrotado. No me arredro, me crezco ante la adversidad, nunca pierdo, jamás retrocedo. No me retes, salvo que quieras que te aplaste como a un gusano. No seas estúpido, no puedes conmigo, aprovecha ahora que puedes correr. Si sigues empeñado en retarme, no tendré más remedio que machacarte. No serás el primero, no serás el último. Aprovecha mi indulgencia y sal corriendo, después será demasiado tarde. Si permaneces te destrozaré de tal forma que nadie te reconocerá. No será nada personal, será tu estupidez la que te lleve a ello. Para mí solo eres un personajillo insignificante. No supones para mí mayor incomodo que una mosca molesta. Pero si agotas mi paciencia te reventaré las entrañas y me las comeré para calmar mi ansiedad.