Pages

Subscribe:

Ads 468x60px

.

Labels

Social Icons

24/1/14

La ciudad donde habitan los sueños

Casi todos mis sueños son urbanos. A fin de cuentas, los sueños se cocinan con la experiencia. Y si esa experiencia está adobada de semáforos, ladrillos y tubos de escape, pues eso es lo que aparece en ellos. Sin embargo, los sueños parecen tener su receta particular. Algunas veces aparecen lugares reales, pero en otros casos las ciudades son desconocidas. Tan reales como las reales, pero imaginarias. Cuánto desearía viajar algún día a las ciudades en las que habitan mis sueños.

23/1/14

La cultura heavy y los subgéneros del metal

El heavy metal es un género musical que abarca una gran cantidad de subgéneros, surgidos en su evolución, en muchos casos al fusionarse con otros estilos musicales. En otra entrada nos referíamos a la singularidad de la cultura heavy y su estrecho vínculo con la música heavy metal. Sin embargo, la aparición de docenas de subgéneros del metal, algunos alejados de la tradición metalera ha abierto el debate sobre los límites del heavy metal. Numerosos aficionados y críticos rechazan la inclusión de muchos subgéneros, vinculados con otros estilos como el hardcore o el hip hop. Con la intención de contribuir a deshacer el entuerto he querido diferenciar entre dos conceptos: cultura heavy y subgéneros del metal.
La cultura heavy viene a ser una forma de vida, ligada a la música heavy, pero no exclusivamente limitada a ella. Esta forma de vida invita a sus adeptos a vestir de una forma determinada, a frecuentar unos lugares o incluso a relacionarse entre ellos de una forma determinada. Los seguidores de la cultura heavy escuchan heavy metal, pero no exclusivamente. El hard rock, el punk o el grunge son estilos aceptados casi con unanimidad por los metaleros, casi sin oposición alguna.
Sin embargo, hay otros géneros que generan controversia, como el deathcore, el nu metal o el brutal death metal suscitan rechazo por numerosos críticos y seguidores. Para comprender esta polémica es preciso comprender el segundo término que mencionábamos: los subgéneros del metal. Como decíamos, el heavy metal se divide en abundantes subgéneros, vinculados a otros estilos. Es ese vínculo lo que, a ojos de algunos, convierte a algunos subgéneros en espurios. El deathcore y el metalcore, por ejemplo, son subgéneros del heavy metal por derecho propio, pero también están relacionados con el hardcore. Esta relación hace que las bandas de estos géneros se alejen de la estética heavy metal y se aproximen más a la del hardcore o el hip hop. En conclusión, estos subgéneros pertenecen, musicalmente hablando, al heavy metal, pero culturalmente se alejan del estilo, los hábitos o la estética heavy metal. A estos subgéneros se le podría añadir el nu metal, el brutal death metal o el rap metal. Es decir, una parte del genero musical heavy metal se encuentra fuera de la cultura del heavy metal y una parte de la música aceptada por los adeptos de la cultura heavy se encuentra fuera del género musical del heavy metal. Si diferenciamos entre cultura heavy y subgéneros del metal desentrañaremos el entuerto conceptual.

8/1/14

El primer amor es platónico

Ni siquiera recuerdo dónde vi por primera vez
el dibujo de un corazón atravesado por una flecha 
uniendo dos nombres,
el un adolescente enamorado y el de su amor platónico. 
Lo que sí recuerdo es que llené mi carpeta con esos símbolos de la locura púber. 
Tenía docenas de ellos, presididos por uno de grandes dimensiones. 
Ella era guapa, supongo, pero para mí era mucho más que eso. 
Me había sonreído
Y eso había hecho que se encendieran todas las luces en mi interior. 
Pasó de ser una chica guapa más a hacerme perder la cabeza.
Me sentí como Ewan McGregor en Big Fish cuando conoce a su amada. 
Después descubrí que todos hacían lo mismo. 
Las chicas tenían nombres de chicos y los chicos, nombres de chicas 
(en aquella época, las otras opciones permanecían en el armario, claro). 
El tiempo hace que descubramos que tras esa sonrisa no había nada más y que los corazones rotos duelen. Pero también, que 
el primer amor es platónico o no es amor 
y que por ficticio que sea, la experiencia es más intensa que cualquier amor terrenal.

3/1/14

¿Improvisación o programación? Claves para escribir un buen libro

Has tenido una buena y quieres convertirla en una novela, pero no sabes si ponerte a escribir inmediatamente o dejar que madure la idea. ¿Qué es mejor? ¿Desarrollar la idea a través de la improvisación o darle forma con calma? 
Escribir un libro es como emprender un viaje hacia un lugar deseado. Si partes sin rumbo comenzarás a dar vueltas y jamás alcanzarás ese lugar. Para llegar a la meta deseada hay que programar el viaje, las rutas, las paradas y el medio de transporte. Del mismo modo, para escribir un libro hay que tener claras unas cuantas ideas globales. Como mínimo debe estar decidida la ubicación espacial y temporal de la trama, las secuencias o capítulos más importantes, los personajes principales y, sobre todo, la idea que se quiere transmitir. Volviendo a la metáfora del viaje, es preciso saber desde dónde se parte y a dónde se pretende llegar. Una vez claro esto, se traza un trayecto coherente para unir esos dos puntos. Cuando no existe programación el escritor se pierde en tramas inconexas y giros imprevisibles que despistan al lector y le hacen perder la atención. Además, las ideas maduradas en la mente con el tiempo han sido puestas a prueba y es más probable que funcionen dentro de la obra. En cambio, las ideas improvisadas suelen mostrarse superficiales y cargadas de tópicos y estereotipos.
Entonces ¿en qué lugar queda la inspiración? Además de la idea principal que habrá surgido por esta vía, la inspiración puede aprovecharse mientras se está narrando una parte preparada. Una dosis de improvisación en los pequeños detalles puede ser muy refrescante y darle dinamismo a la obra. Pero esas expresiones de la inspiración espontánea siempre se deben ceñir a partes menores, siempre en coherencia con el sentido global de la obra.

1/1/14

Beso por sorpresa

__¿Y este beso?
__Tu amigo me pidió que te diera un beso de su parte.
__Pero ¿con lengua?
__Eh, bueno, no especificó.